Intervención de Mónica Cobo en septiembre de 2016 en el Pleno del Ayuntamiento de Getafe
Escuchaba la semana pasada durante un debate en una de nuestras emisoras locales de radio de mayor difusión, como uno de los contertulios opinaba en relación a nuestra Proposición al Pleno sobre la información y transparencia respecto al uso de tarjetas de crédito en el ayuntamiento de Getafe; que no sabía si Mónica conocería algún caso de uso de “tarjetas black” en el municipio, que hubiese propiciado la presentación de esta Proposición.
Me sirve este comentario para visualizar con todos ustedes los efectos de una cultura predominante en muchas instituciones públicas y en muchos representantes políticos: las medidas de regeneración democrática y de transparencia aparecen como consecuencia de un escándalo, es decir, cuando surge el escándalo de las tarjetas black en Bankia es cuando se producen las reacciones institucionales para el control y denuncia del mal uso de estas tarjetas… Cuando surge el escándalo por un proceso de adjudicación mal realizado es cuando las instituciones y sus representantes toman medidas correctoras, destituciones, modificaciones en los procedimientos…
Desde Ciudadanos pensamos que la transparencia, especialmente en lo relativo al uso de los recursos que los españoles ponen a nuestra disposición con sus impuestos, es una necesidad inherente al ejercicio de la actividad institucional y política, y por eso trabajamos para llevar esta transparencia a todos los ámbitos de la actividad pública en los que tenemos la posibilidad de hacerlo, como consecuencia de la representación que nos han otorgado nuestros votantes.
En esa búsqueda de transparencia, como hemos referido, la experiencia nos dice que el uso de tarjetas de crédito en organismos públicos y sus entidades dependientes puede ser un tema sensible al que conviene prestar atención, aun en el caso de que su utilización haya sido nula o escasa por parte de los anteriores gobiernos municipales, garantizando que de producirse su uso se realiza con las máximas garantías.
Las tarjetas de crédito corporativas son una herramienta que, en determinadas circunstancias, pueden estar justificadas para facilitar el ejercicio de sus funciones a determinados trabajadores, habitualmente directivos, por razones de representación, eficacia u otras que, en cualquier caso, deben estar debidamente motivadas, y siempre en unas estrictas condiciones de responsabilidad y exigencia de transparencia en su uso, pues otorgan a una persona una determinada capacidad de discrecionalidad en la realización de un gasto a cuenta de la entidad que se la concede, como podría ser en este caso, el Ayuntamiento de Getafe.
El objetivo de nuestra proposición no es el de hacer extinguir el uso de tarjetas cuando esté justificado, pues eso podría significar el regreso a medios de pago, como la solicitud de anticipos de caja, o el adelanto del gasto por parte del responsable para su cobro posterior tras justificación, que pueden resultar menos operativos.
Por el contrario, nuestro objetivo es garantizar el control exhaustivo del uso de las tarjetas de crédito, que debería contar con un protocolo claro y transparente en el que deberían fijarse:
- Los puestos o cargos que pueden disponer de tarjeta a cargo del Ayuntamiento
- La delimitación expresa del tipo de gasto y las condiciones en que sea admitido su uso, así como los límites de gasto totales (por mes) y por tipo de gasto
- Las características de los justificantes que deben acompañarse en cada uso de la tarjeta
- Las condiciones de transparencia e información a los miembros de la Corporación Municipal y a los ciudadanos sobre el uso de las tarjetas corporativas que, a nuestro juicio, es lo más urgente y, por lo tanto, constituye el contenido de esta proposición.
Decidimos fijar un periodo de análisis de 6 años con el fin de recabar información sobre el uso dado a las tarjetas, si este ha sido el caso, en la presente y en las dos anteriores legislaturas en las que el equipo de gobierno ha correspondido a diferentes partidos presentes en esta corporación.
En nuestra opinión, no debe ser, por tanto, la sospecha, la confrontación política o el famoso “y tú más” que tanto tiempo lleva presidiendo la actuación política del obsoleto bipartidismo del Partido Socialista y el Partido Popular, el elemento que condicione los objetivos y la actividad de este Pleno.
La transparencia en las actuaciones de las instituciones públicas y la regeneración democrática conforman uno de los ejes fundamentales de nuestro compromiso con los ciudadanos de Getafe, junto con la reactivación económica, la creación de empleo y la mejora en la prestación de servicios a los ciudadanos.
El voto favorable de todos los grupos sería un buen ejemplo para nuestros vecinos del interés de todos por avanzar en este nuevo estilo, más transparente y limpio, de gestión en el Ayuntamiento de Getafe, al que los viejos partidos pueden incorporarse si sus intenciones de regeneración son sinceros.
Desde luego, nosotros vamos a seguir en esta línea, y no solo procurando implementar nuevos hábitos de gestión democrática de las instituciones, sino también ejerciendo nuestra labor de control y fiscalización de la actividad del Gobierno municipal, por lo que nuestra propuesta pide también información sobre el uso de las tarjetas corporativas en las dos legislaturas anteriores a la que nos encontramos, con el objetivo de conocer las condiciones en las que, en su caso, han sido utilizadas durante los gobiernos de PSOE y PP.